Optometría

La optometría es el estudio de las habilidades visuales, ello permite detectar el desarrollo de problemas de eficacia visual, tanto si son inherentes al desarrollo del niño o adulto como si son consecuencia de una mala adaptación al medio, en función de un desequilipio entre las capacidades de la persona o las exigencias del medio.

Ello posibilita al Optometrista proporcionar soluciones globales a los problemas visuales previniendo los posibles trastornos de la conducta visual y proporcionando un adecuado desarrollo de la visión en el niño y el adulto.

Emetropía

Se denomina emetropía a la condición ocular ideal, de manera que el ojo, sin hacer esfuerzo o sin ayuda de gafas, logra focalizar los rayos en su retina. Se habla, por lo tanto, de ojo emétrope cuando no existe defecto de refracción o ametropía.

Hipermetropía

La hipermetropía es el defecto de refracción más frecuente. Caracterizada por la visión borrosa en distancia corta y lejana en función del grado de la misma. Error de refracción que caracterizado por la “necesidad de potencia ocular”, se compensa con lentes positivas o convexas, tanto en gafa como en lentes de contacto y cirugía refractiva.

En el nacimiento, el ojo presenta una hipermetropía de entre 2,5-3 D, que tiende a desaparecer con el desarrollo, aunque en más del 50% de la población adulta persiste cierto grado de hipermetropía.

  Se puede clasificar en:

  1. Hipermetropía axial: menor longitud del eje antero-posterior, ojos más pequeños.
  2. Hipermetropía de curvatura: curvatura corneal plana, con menor potencia.
  3. Hipermetropía de índice: descenso del poder refractivo del cristalino.

Miopía

La miopía afecta al 10% de la población, iniciándose generalmente en la juventud (entre los 6 y 20 años). Error de refracción esférico que se caracteriza por la visión borrosa en distancia lejana, por el que los rayos procedentes del infinito focalizan por delante de la retina en ausencia de acomodación. Esta ametropía progresiva generalmente se estaciona con el fin del crecimiento y no suele superar las 5-6 D (> 6D, miopía magna). Puede ser compensada con lentes negativas o divergentes, lentes de contacto y cirugía refractiva.

Desde el punto de vista óptico, la miopía puede ser:

  1. Miopía axial: aumento de la longitud del eje antero posterior, ojos más grandes.
  2. Miopía de curvatura: incremento de la curvatura corneal o del cristalino, mayor potencia.
  3. Miopía de índice: aumento del índice de refracción del cristalino, típico en la catarata nuclear.

Las diferentes técnicas de prevención para controlar su desarrollo, no han sido demostradas aún como efectivas.

Astigmatismo

El astigmatismo suele aparecer a edades tempranas y no tiende a evolucionar. Más del 95% de las personas presentan un grado leve de astigmatismo corneal, llamado astigmatismo fisiológico, que se compensa con un astigmatismo inverso del cristalino. En este defecto refractivo se caracteriza por que existe distinta potencia en distintos meridianos del ojo, lo que impide que se forme en la retina una imagen puntual a partir de un punto.

Los astigmatismos se clasifican, según su relación con la retina, en:

  1. Astigmatismo simple: uno de los focos se sitúa sope retina, mientras que el otro puede caer por delante o detrás de ella. Un meridiano es emétrope y el otro miope ó hipermétrope y se conoce como astigmatismo hipermetrópico simple ó miópico simple.
  2. Astigmatismo compuesto: asociado a un defecto esférico. Ninguno de los focos se sitúa en retina, quedan por delante o detrás de ella. Se conoce como astigmatismo hipermetrópico compuesto ó miópico compuesto. Y astigmatismo mixto cuando un foco queda delante y otro detrás de retina.

Las personas con astigmatismo severo, tienen visión borrosa a cualquier distancia, mientras que un astigmatismo bajo, suelen tener síntomas como:

  • Dolor de cabeza.
  • Cansancio ocular.
  • Visión borrosa de cerca cuando llevan algún tiempo utilizando la vista a esa distancia.

Esta ametropía puede ser compensada con gafas, lentes de contacto y cirugía refractiva.

Presbicia

Estado refractivo del ojo, en el cual a causa de la disminución fisiológica de la amplitud de acomodación por la edad, no se puede mantener una visión nítida en la distancias cortas y existe dificultad en la lectura. En ojos emétropes, la presbicia aparece entre los 40 y 45 años, donde todavía existe acomodación suficiente para enfocar a la distancia de lectura, pero no es capaz de mantener esa acomodación durante cierto tiempo, en parte debido a la pérdida de flexibilidad del cristalino.  En hipermétropes, al existir hipermetropía latente, los síntomas de presbicia se hacen evidentes antes que en el emétrope, necesitando refracción de lejos y una adición de cerca. Un ojo miope no compensado ó hipo-compensado, será capaz de leer sin adición de cerca. Por tanto, la presbicia no sólo depende de la edad, sino también de la refracción de lejos y distancias de trabajo de cada individuo.

La presbicia puede ser compensada con gafas, lentes de contacto y cirugía refractiva.

Procedimientos optométricos

AV

La mayoría de las personas piensan que ver bien es distinguir nítidamente todos los objetos lo más lejos posible. Este concepto no es erróneo pero sí simplista. Ver no sólo implica tener una buena agudeza visual, es decir, ver lo más lejos posible, sino que implica muchas otras  habilidades visuales como pueden ser: capacidad de enfoque lejos-cerca, habilidad de mover los ojos correctamente, tener una binocularidad correcta, una buena coordinación ojo-mano, una buena estereopsis…

Cover Test

El cover test es una prueba que nos permite evaluar la presencia y la magnitud de una desviación ocular manifiesta o no (estrabismo o foria) en un paciente. Una foria es una desviación latente del ojo al estar en reposo, mientras que una tropia es una desviación constante o manifiesta (estrabismo). Además, esta prueba nos permite determinar la presencia o ausencia de la habilidad funcional motora ocular del paciente.

Retinoscopía

La retinoscopía también es conocida como esquiascopía, se refiere al estudio de las sompas cuando proyectamos una franja de luz sope la pupila del paciente, de manera que a partir de su movimiento e intensidad podemos obtener el valor de la ametropía del paciente en visión lejana. Estos resultados sirven como punto de partida para el examen refractivo subjetivo realizado por el óptico optometrista.

Examen biomicroscopía

La lámpara de hendidura, también llamada biomicroscopio, es un dispositivo óptico que se utiliza en oftalmología y optometría para la exploración de las estructuras de la porción anterior del ojo.

Consiste en un microscopio binocular dotado de una potente fuente de luz que permite ver en tres dimensiones y con una amplificación que oscila entre 6 y 40 aumentos, las estructuras del polo anterior del ojo: párpado, conjuntiva,  córnea, iris, cristalino y cámara anterior. Si se le adaptan unas lentes especiales, es posible visualizar las estructuras más profundas del globo ocular como el humor vítreo, la retina y la papila óptica o disco óptico.

Se trata de una tecnología esencial en oftalmología y optometría con la que es posible detectar la posición, forma y profundidad de cualquier anomalía en el polo anterior del ojo, siendo fundamental para la adaptación de lentes de contacto.

Presión intraocular

La presión intraocular es la presión que ejercen los líquidos oculares contra la pared del ojo, la cual es necesaria para que este órgano se mantenga distendido. El equilipio entre producción y reabsorción del humor acuoso  es el principal factor que determina el nivel de presión intraocular. Por otra parte la elevación de la presión intraocular o hipertensión ocular es el principal factor de riesgo para que se desarrolle una enfermedad del ojo conocida como glaucoma.

La presión ocular se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) mediante un dispositivo llamado tonómetro. La presión ocular normal varía entre 12 y 22 mm Hg, siendo la media de 16 mm Hg y la presión ocular que supere los 22 mm Hg se considera superior a la normal. Cuando la PIO es superior a los valores normales pero la persona no muestra signos de glaucoma, esto se denomina hipertensión ocular.

La presión ocular elevada por sí sola no provoca glaucoma. Sin embargo, es un importante factor de riesgo. Los individuos que hayan recibido un diagnóstico de presión ocular elevada deben someterse a exámenes oculares integrales y periódicos para detectar la presencia de signos que indiquen la aparición de glaucoma.

Pruebas/test específicas

Se puede llegar a necesitar una prueba adicional basada en los resultados de pruebas anteriores para confirmar o descartar posibles problemas, para aclarar resultados inciertos o para proporcionar un análisis más profundo.

Una vez terminado el examen, su optometrista analizará y evaluará los resultados de la prueba para determinar un diagnóstico y programar un tratamiento. El profesional analizará con usted la naturaleza de sus problemas de salud ocular o visual y le explicará las opciones de tratamientos disponibles. En algunos casos se puede indicar una derivación para una consulta o un tratamiento con otro optometrista o profesional de la salud.

Si tiene preguntas con respecto a algunas enfermedades visuales u oculares diagnosticadas, o sope el tratamiento recomendado, no dude en pedir más información o explicaciones adicionales.